- · A través de un punto de acuerdo inscrito en la Asamblea Legislativa se busca dar certidumbre a ciudadanos ante emergencias de la Ciudad.
- · La participación de la sociedad civil es indispensable en creación del Programa para la Reconstrucción, Recuperación, y Transformación de la Ciudad de México
Mediante un punto de acuerdo, el diputado Darío Carrasco Aguilar solicitará
al Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, incluya en el Programa
para la Reconstrucción, Recuperación, y Transformación de la Ciudad de México
un decreto sobre la suspensión de construcciones
de nuevos edificios en zonas denominadas de alto riesgo sísmico.
El legislador urgió al Gobierno de la Ciudad de México, para qué, en conjunto con ciudadanos afectados, damnificados,
empresarios, expertos, urbanistas, ONG’s y sociedad en general, lleve a cabo la
redefinición de la política de desarrollo urbano desarrollada hasta ahora, en
la que se tome en cuenta el tipo de suelo, el riesgo sísmico y las necesidades
de agua generadas por la demanda de servicios con la finalidad de garantizar la
seguridad y tranquilidad de los ciudadanos.
Carrasco Aguilar informó,
que en el punto de acuerdo, solicitará que se incluya en las funciones de la Comisión para la
Reconstrucción, Recuperación, y Transformación de la Ciudad de México, la
investigación y cuantificación de daños materiales y económicos de la Ciudad, y
la evaluación del origen, características y consecuencias del sismo.
Así mismo destacó la
necesidad de realizar los estudios necesarios para determinar el grado de
afectación en el terreno de nuevas construcciones y por ende en los daños generados
por el sismo, con la finalidad de formular programas que permitan tomar medidas
para disminuir los daños ocasionados por sismos en el futuro.
Darío Carrasco enfatizó en la urgencia de discutir y aprobar a
la brevedad las reformas legales necesarias para garantizar la reconstrucción y
reorganización de las zonas que fueron afectadas por los sismos, y en general
de toda la Ciudad de México priorizando la seguridad humana de sus habitantes,
con plena participación de la sociedad civil.
“La gente lo dice, y
nosotros tenemos el deber de replicarlo: no basta con un plan de rescate o con
un plan que contemple sólo responder a la emergencia, requerimos un plan que
tome en cuenta las características del suelo de nuestra ciudad, evite las
emergencias y dé certidumbre a sus habitantes” finalizó
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