ECUADOR ESTÁ DE LUTO

 


Fallece el escritor e historiador el Dr. Jorge Núñez Sánchez, a los 73 años de edad, la noticia la dio a conocer su esposa a través de redes sociales.


"Queridas amigas y amigos, 


Después de un largo proceso de lucha contra ese mortal enemigo invisible: un cáncer de páncreas que luego se extendió al hígado y posteriormente a todo el aparato digestivo, mi querido esposo y compañero  de luchas, de sueños y de trabajos históricos, Jorge Núñez Sánchez, se fue a tierras ignotas.  Tuvo un largo proceso de enfermedad que empezó a perfilarse en el mes de febrero, durante el cual no quiso ir al médico, aunque me pasé diciéndole todo el tiempo que fuéramos para que le hicieran un examen, pero como el dolor era bajito y le pasaba, no le dio mucha importancia. En marzo le hicieron el primer examen en el Hospital Metropolitano, pero no porque hubiéramos ido para que el se atendiera, sino porque yo amanecí con una especie de parálisis de la espalda y muy adolorida, por el trabajo doméstico en la casa. Mi esposo de inmediato me llevó al Metropolitano y aproveché para decirle al médico que me atendía que había que atenderlo a él de manera urgente y que le realizaran exámenes.  Así los hicieron los médicos y cuando yo fui dada de alta a las 3p.m. me enteré de que {el estaba ya hospitalizado y le estaban haciendo exámenes y luego me comunicaron que no podía volver a casa, porque faltaban varios exámenes. Pasó una semana en el Hospital hasta que el último día me informaron que le habían descubierto el cáncer del Páncreas y que estaba pequeño y podía ser operado.  Lamentablemente, por consejo de terceras personas de la familia, y de las amistades que le dijeron que fuera a SOLCA, el hospital del cáncer, decidió que se haría atender allí.  Lamentablemente, mi esposo me dijo que yo no debía acompañarlo, que solo podía llevarlo uno de sus hijos, quien vive aquí en Quito, porque podía contagiarme de coronavirus. Me vi obligada a obedecer esta orden porque esa información era cierta.  Sin embargo, ante la poca información que yo recibía, tanto de mi esposo como del hijo que lo acompañaba, decidí ir casi un mes después de que hubiera iniciado sus viajes a Solca y descubrí que era terrible la situación que se vivía allí, había personas de todas las edades entremezcladas, en una sala muy estrecha de espera y criaturas que corría por aquí y por allá, y personas de edad madura haciendo una cola por otro lado. Yo me horroricé ante eso y le di la orden al hijo que lo acompañaba de que no había que llevarlo más a este hospital, que volviéramos al Metropolitano.  Y así fue. Volvimos al Metropolitano y cuando lo revisaron le dijeron que ya no era posible la operación, que había que darle "quimioterapia" para rebajar el tamaño del cáncer.  Y le dieron 4 quimios, que lo dejaron reducido a la más mínima expresión de su cuerpo.  Jorge tuvo plena conciencia de que las quimios estaban acabando con él y tomó la decisión de retirarse y buscar un tratamiento alternativo. Sabíamos que ese tratamiento no le garantizaba la vida, pero que podía aminorar en grado sumo, los sufrimientos. Así fue, que se buscó información con amigos y él decidió en qué institución se iba a hacer atender. Y fue atendido cotidianamente, durante todas las mañanas con varios tratamientos. sin embargo, el enemigo letal siguió avanzando. Vino la hija de Jorge que vive en EEUU y fue de mucho apoyo para nosotros y sobre todo para su padre, que siempre la adoró. Cambiaron las cosas, dijeron que ya no había que darle el montón de remedios que le habían vendido a mi esposo. Que había que darle gusto en todo lo que quisiera comer. Comprendí entonces que habíamos llegado al punto de no regreso. Y fue así como los dos hijos que siempre lo acompañaron, le llevaban la comida que él quería. Tomaba medicación para el dolor, pero los dolores comenzaron a aumentar y se le aumentaba también la medicación para el dolor.  Los últimos meses fueron tristes y dolorosos, porque ya mi esposo, prácticamente no podía levantarse de la cama, sin embargo, su mente seguía lúcida y se daba perfecta cuenta de lo que estaba pasando y esto le producía mucho dolor.  Así llegó el momento fatal de hospitalizarlo nuevamente en el Metropolitano, en donde lo atendieron hasta que llegó el día fatal de su defunción, el 1o. de noviembre a las 11 a.m. Yo le estaba hablando con mucho cariño y le tenía tomada su mano derecha y le decía que descanse, que no quiero que sufra más, que él estaba dejando un inmenso legado a su país, Ecuador, e incluso, a Nuestra América, a esa América Latina que tanto había amado y exaltado y, de pronto sentí que se había ido y una sensación de pánico me estremeció y no fui capaz de decir nada, salí de la habitación a buscar al doctor que estaba a cargo y me dijeron que lo llamarían de inmediato. Volví a la habitación y esperé a que llegara el doctor y apenas llegó, lo revisó y me indicó que ciertamente, había acabado de fallecer. 


Sólo me resta decir que Jorge, mi compañero de luchas, de sueños, de viajes, de investigaciones y Encuentros, y Mesas redondas, se fue en paz, con la dignidad que siempre lo caracterizó y que dejó como ya lo dije un legado histórico muy importante para las viejas nuevas generaciones. Amó a su país, amó a "Nuestra América", fue un hombre de paz y de lucha por las mejores causas.  Descansó por fin de sus dolores, este 1o. de noviembre de 2020. a las 11 a.m.


Gracias a todos/as las/los amigos/as, compañeros/compañeras, hermanos/as, familiares en general, por sus mensajes de condolencia. Jorge está haciendo un nuevo viaje hacia el infinito.


Con inmenso cariño,


Su esposa y compañera de luchas, de sueños, de trabajos, de viajes, de reuniones, de ilusiones...


Jenny Londoño López"


Al mismo tiempo, se dio a conocer las disposiciones exequiales que deberían cumplirse al pie de la letra. 


"Querida familia, amigas (os), y compañeras (os):


El Dr. Jorge Núñez Sánchez firmó una declaración algunas semanas antes de su deceso, en la cual informó, que por ser un libre pensador, no aceptaba ningún tipo de ceremonia religiosa.


En consecuencia, no habrá velación pública, incluso por las restricciones existentes, con motivo de la emergencia sanitaria.


De acuerdo a sus disposiciones, se efectuará una ceremonia privada con sus hermanos masones. 


Las personas e instituciones que deseen enviar ofrendas florales, podrán hacerlo, el día lunes 2 de noviembre, únicamente, de 9h30 a 10h30, a la "Fundación Equinoccial", ubicada en la calle Iñaquito y Juan Pablo Cruz, en la ciudad de Quito. Mil gracias por su apoyo a esta decisión. 


Posteriormente, tendrá lugar la cremación de sus restos, en el Memorial, con asistencia de sus familiares más íntimos, su esposa y hermanos, exclusivamente.


Al momento, sus familiares ya se encuentran reunidos, pues desean la mayor intimidad posible, con motivo de este lamentable hecho que enluta al país y al mundo de las ciencias.


Adicionalmente, se está preparando un Homenaje on line, para el día miércoles 4 de noviembre a las 20h00, en cuanto tengamos el Link, les enviaremos de inmediato. Muchas gracias por su comprensión." 

Sereno y con esa lucidez magistral que siempre lo caracterizó, se despidió el maestro Jorge Núñez, en sus letras nunca hubo espacio para titubeos, en esta, la propia, habría sido imperdonable para el mismo. 


Ese rigor a la hora deprecisa cada hecho registrado, no podía pasar desapercibido a la hora de registrar un evento, doloroso y de incalculable valor. 


Descanse en paz

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