En el marco de la sesión extraordinaria del Consejo Mexicano para el
Desarrollo Rural Sustentable, la dirigencia del frente de organizaciones
campesinas denominado El Campo es de Todos, en conferencia de prensa urgieron a
discutir la salida del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de
América del Norte (TLCAN).
En este sentido, José Narro Céspedes aseveró que la pequeña agricultura
no fue tomada en cuenta en el TLCAN y el sector que se tomó como moneda de
cambio y fue sacrificado, fue el campo por eso el incremento en las
importaciones de maíz a más de 14 millones de toneladas, cuando al momento de
la firma del tratado, se importaban apenas 2 millones toneladas.
El dirigente de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala (CNPA) informó
que México importa el 40% de la carne, el 85% del arroz, el 95% de la soya,
“hemos pasado a ser un país que ha incrementado aceleradamente su dependencia
alimentaria, sacrificando a la pequeña agricultura y beneficiado a los
productores de la agricultura comercial que fundamentalmente obtienen sus
ganancias al comprar barato en el mercado internacional y vender caro en México
porque son los beneficiados en el TLC”.
Narro Céspedes, dijo que, en la pasada negociación con EU del azúcar,
México tiene excedentes del endulzante por 1.5 millones de toneladas, pues
existe una producción récord de 6 millones de toneladas de azúcar, sin embargo,
se tuvieron que vender a mitad de precio, a pesar de que ya estaban negociadas.
Por esto, afirmó que los tiempos de negociación benefician a EU y no a
México, por lo que la negociación del tratado se tiene que hacer hasta 2019,
después del proceso electoral de 2018 y “tenemos que sacar al capítulo
agropecuario del TLCAN, porque más que México, es EU quien necesita del
Tratado, pues han sido los beneficiados, porque no han reconocido la necesidad
de que no sólo haya un intercambio de mercancías, sino también de personas como
pasa en la Unión Europea. Quieren nuestra riqueza, pero no quieren a nuestra
gente, por eso quieren construir un muro” -sentenció.
El dirigente de la CNPA informó que en Estados Unidos en la Ley Agrícola
han planteado la necesidad de duplicar para 2023 el presupuesto para el campo
(PEC), en México el PEC ha venido cayendo. “Necesitamos fortalecer el mercado
interno y la pequeña agricultura para recuperar la Soberanía Alimentaria en
México”.
En este sentido, mencionó que “mientras un agricultor norteamericano
recibe de subsidio 2 millones de pesos, aquí un campesino recibe si bien le va,
5 mil pesos en promedio. No hay una política real para apoyar a la pequeña
agricultura”.
Por su parte, José Dolores López Barrios dirigente de CIOAC-JDLD,
aseguró que el TLCAN ha sido perjudicial para la mayoría de los productores del
campo e indígenas del país, por lo que llamó al Gobierno Federal a tomar en
cuenta los argumentos de las organizaciones campesinas, sobre todo, en el
sentido de sacar al campo mexicano de acuerdo comercial de América del Norte.
Por ello, llamó a realizar una consulta nacional -“con la gente que
tiene que ver con el sector para ver si funciona y ver si están de acuerdo en
la negociación del tratado, pues en este momento nosotros la llevamos de
perder”. Afirmó que sólo 18 mil unidades de producción, de más de 5 millones,
tienen posibilidades de exportar pues no tienen condiciones ni las
posibilidades para competir.
Jaime Castillo Ulloa, secretario de UNORCA, afirmó que necesitamos sacar
a la agricultura del TLCAN, pues no hay condiciones en el país para generar la
competitividad en el sector y sacar al campo del tratado, significa renegociar
con diferentes condiciones, pero con un impulso al desarrollo en el país”.
Por ello aseguró México no ha tenido ningún beneficio en 23 años, por la
firma de este acuerdo comercial, por lo que es prioritario el rescate de la
economía del país, “necesitamos fortalecer el desarrollo productivo,
necesitamos que no haya más recortes en el presupuesto y entonces podemos
sentarnos a renegociar en diferentes condiciones”.
Así, reiteró que debemos garantizar la alimentación en el país y
garantizar la soberanía alimentaria y entonces hablar de un intercambio
comercial justo y exportar lo que tengamos de excedente en el país. “Somos
competitivos en algunos productos y hortalizas de los que se han beneficiado
los Brokers, no los campesinos, entonces debemos revertir las condiciones del
mercado interno”.
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